Francisco Sevilla (Troni)
Célebre picador de toros -hermano del también picador, José – nacido en 1805 en la ciudad de la Giralda , precisamente el mismo año que el rey Carlos IV prohibió en España las corridas de toros , y falleció el (27-10-1842),a los 37 años de edad, a causa de las tremendas caídas sufridas, siendo la peor la que le produjo un toro de la ganadería de los duques de Osuna XI y de Veragua XIII, que presentó en la antigua Plaza de Toros de Madrid una corrida en la que destacaron los toros : Ventero, que derribó al famoso picador Curro Sevilla, que formó parte de aquel «trío de varilargueros cumbres», los de más formidable empuje de cuantos manejaron la vara de defender desde que el torear su hizo profesión y oficio y esos tres coloso de la lidia a caballo, diestros ni antes ni después de su tiempo han sido superados, tales fueron: Luis Corbacho, Francisco Sevilla y José Trigo (Recortes). El referido animal, era hijo de una de las vacas que él mismo había ayudado a conducir como cabestrero, cuando desde Sevilla fueron llevadas a Castilla para ser entregadas a Fernando VII; el otro astado, tan poderoso y bravo astado como el anterior, llevó el nombre de Saltador, mató siete caballos y mandó a la enfermería igual número de picadores seriamente lesionados. Este suceso dio lugar a que al anunciar las corridas siguientes a aquélla se advirtiese que «en caso de inutilizarse los picadores señalados en el cartel, «no puede exigirse que salgan otros.» Con el nombre de Saltador se han lidiado toros que causaron la muerte por cogida a los diestros siguientes: Miguel Freg, Manuel Ballesteros (Meco), Ángel C. Carratalá y Enrique Cano (Gavira).
Sevilla se caracterizó por sus muchas proezas ante los astados, la mayoría de las cuales se conocen, pero no así –lo cual es común en casi todos los diestros de hace dos siglos- el conocimiento de datos indispensables para escribir una detallada biografía, de ahí que sean muy parcos los biógrafos en dar precisiones sobre la vida de este gran lidiador.
El historiador Sánchez de Neira, que le vio trabajar, hace de él un retrato que coincide con el señalado de Gautie: «Uno de los picadores de más poder que se han conocido, moreno y muy robusto, aunque no de gran estatura, lucía por su valor y fuerza más que por sus cualidades de jinete, habiendo ocasiones que clavó la garrocha en lo alto del cerviguillo, introduciéndola más de una cuarta, y otra en que caído al suelo, derribó aun toro agarrándole de un asta. Luchó en buena lid con los celebres Andrés Hormigo, Antonio Sánchez (Poquito Pan) y Manuel González, aventajándoles en volunta y poder», pero le ganaron en finura e inteligencia taurómaca. En cambio, ninguno le ganaron en lo que concernía a valentía, entusiasmo, fortaleza y gallardía ante las fieras.
Fuente:Victimas del Toreo.Picadores. Juan Saldivar Ortega, El Puerto de Santa Maria, 2009, P. 68
Sevilla se caracterizó por sus muchas proezas ante los astados, la mayoría de las cuales se conocen, pero no así –lo cual es común en casi todos los diestros de hace dos siglos- el conocimiento de datos indispensables para escribir una detallada biografía, de ahí que sean muy parcos los biógrafos en dar precisiones sobre la vida de este gran lidiador.
El historiador Sánchez de Neira, que le vio trabajar, hace de él un retrato que coincide con el señalado de Gautie: «Uno de los picadores de más poder que se han conocido, moreno y muy robusto, aunque no de gran estatura, lucía por su valor y fuerza más que por sus cualidades de jinete, habiendo ocasiones que clavó la garrocha en lo alto del cerviguillo, introduciéndola más de una cuarta, y otra en que caído al suelo, derribó aun toro agarrándole de un asta. Luchó en buena lid con los celebres Andrés Hormigo, Antonio Sánchez (Poquito Pan) y Manuel González, aventajándoles en volunta y poder», pero le ganaron en finura e inteligencia taurómaca. En cambio, ninguno le ganaron en lo que concernía a valentía, entusiasmo, fortaleza y gallardía ante las fieras.
Fuente:Victimas del Toreo.Picadores. Juan Saldivar Ortega, El Puerto de Santa Maria, 2009, P. 68
NO SABIA QUE HABIA EXISTIDO UN PICADOR LLAMADO COMO YO,LO CUAL,ME SATISFACE,OI,HACE TIEMPO,QUE UN BANDERILLERO DE ALBACETE,SE ANUNCIO,COMO CURRO SEVILLA,PERO NO SE MAS,DE TODOS MODOS,MI NOMBRE,QUE LEGITIMADO,COMO ARTISTA,SOY YO,EL UNICO QUE ME PUEDO ANUNCIAR,EN LA ACTUALIDAD,COMO TAL,SIEMPRE SERE COMO JOSELITO,EL VERDADERO. CURRO SEVILLA.