EL EJE DE LA LIDIA

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"Normalmente, el primer puyazo lo toman bien los toros, y si ése fuera el único del tercio, todos parecerían bravos. En el segundo ya empiezan a dar síntomas de su categoría de bravura. Y es en el tercero donde se define de verdad si el toro es bravo o no. En el tercer puyazo casi todos los toros cantan la gallina, se suele decir". JOAQUÍN VIDAL : "El Toreo es Grandeza". Foto: "Jardinero" de la Ganadería los Maños, primera de cuatro entradas al caballo. Corrida Concurso VIC FEZENSAC 2017. Foto : Pocho Paccini Bustos.

martes, febrero 01, 2011

Machaquito el Tercer Califa del toreo

Machaquito, matador de toros

Torero de pundonor y arrojo, el cordobés destacó sobremanera por su contundencia al ejecutar la suerte suprema Hoy se cumplen 50 años de la muerte de quien está considerado tercer califa del toreo
Justo hoy hace 50 años, el 1 de noviembre de 1955, festividad de Todos los Santos, fallecía en Córdoba el matador de toros Rafael González Madrid Machaquito , prototipo de pundonor y excelente intérprete del volapié. Considerado como el tercer califa del toreo, "desde sus comienzos destacó por su valentía y por el arrojo que derrochó en los ruedos", según palabras del periodista José Luis de Córdoba.
Nacido el 2 de enero de 1880, compartió sus inicios en los ruedos junto a Rafael Molina Martínez Lagartijo Chico, encuadrados ambos en la cuadrilla juvenil que regentaba Rafael Sánchez El Bebe. Con Lagartijo Chico alternó también como novillero y con él se presentó en Córdoba el 27 de septiembre de 1896 y en Madrid el 8 de septiembre de 1898. Ambos espadas llegaron también juntos a la alternativa, celebrada en Madrid el 16 de septiembre de 1900.
Cuenta José Luis de Córdoba que, aunque como novillero Machaquito fue siempre por delante de Lagartijo Chico en los carteles, para el doctorado se decidió efectuar un sorteo del que saldría el lugar a ocupar por los actuantes en lo sucesivo.

"El más decidío"

"En el sorteo realizado por el crítico José de la Loma Don Modesto --recuerda--, le tocó a Lagartijo Chico figurar en primer lugar en los carteles, cosa que contrarió a Machaquito. Su hermano y puntillero de la cuadrilla, José Machaco, trató de consolarle con estas palabras: ´¡No te preocupes, Rafael! Que no será mejor el que vaya primero, sino el más decidío´".
A partir de entonces --a Machaquito le había cedido Bombita el toro Costillares , de Veragua, para su doctorado--, raramente coincidieron ambos toreros en el mismo cartel. Mientras Machaquito triunfaba por su valor y decisión, Lagartijo Chico, aquejado de una enfermedad incurable, no pudo desarrollar lo que llevaba dentro.
Al referirse José Luis de Córdoba a algunos de los hechos destacados de la trayectoria de Machaquito, el periodista recuerda lo ocurrido el 29 de agosto de 1902 en el pueblo cordobés de Hinojosa del Duque, "en que pudo ocurrir una tragedia al venirse abajo parte de los tendidos" de la plaza de toros en la que Machaquito actuaba como único espada. "El diestro, jugándose la vida, acertó a matar de certera estocada al toro que se encontraba en el ruedo, que se llamaba Perdigón y era de la ganadería de los hermanos Lozano, de Priego". Aquel gesto le valió al torero cordobés la concesión de la Cruz de Beneficencia.

´La estocada de la tarde´

Pero de entre todas sus actuaciones, una pasaría a la historia taurina. Fue la tarde del 9 de mayo de 1907, en que Machaquito, en compañía de Antonio Fuentes, Ricardo Torres Bombita y Cocherito de Bilbao, estoqueó en Madrid de forma magistral --previa faena pletórica de valor-- a un buen mozo de Miura llamado Barbero, "un ejemplar con arrobas y pitones que tuvo una muerte espectacular". Don Modesto dedicó su crónica de El Liberal a la estocada y brindó a Mariano Benlliure, el famoso escultor levantino, la idea de plasmar en una obra maestra el momento en que el toro, con la espada enterrada en la cruz, se tambaleaba a la hora de la muerte, llevando en el pitón derecho un girón de la camisa de su matador. Y de ahí nació la escultura titulada La estocada de la tarde, que alcanzó celebridad y cuya reproducción se entrega desde hace 40 años para premiar la mejor estocada de las ejecutadas en la Feria de Mayo.
Según el tratado Los Toros, de Cossío, Machaquito derrochó voluntad a lo largo de su carrera y, sin ser un torero fino, sus ganas de ser en el toreo le hicieron evolucionar admirablemente y ocupar la cabeza del escalafón de la época. Además, Cossío recuerda que el público nunca salía defraudado al llegar la hora de la suerte suprema. "Mataba con una decisión impresionante, a toma y daca pudiéramos decir", señala Los Toros. Y en esta mima obra, se suscriben las palabras de Guillén Sotelo: "No hubo, desde el 16 de septiembre de 1900 al 22 de octubre de 1913, quien echara a rodar toros como el menudo cordobés, nervioso y valiente, que llegó a donde llegó por su esfuerzo poderoso, grandioso".

Corte de coleta

El 16 de octubre de 1913 toreó Machaquito su última corrida en la plaza de Madrid. En aquel festejo le dio la alternativa a Juan Belmonte en presencia de Rafael Gómez El Gallo. Pocos días después, el 21 de aquel mismo mes, cuando se encontraba con su familia en un hotel madrileño, Machaquito pidió que le cortaran la coleta. "Así acababa --señala José Luis de Córdoba-- la historia de uno de los toreros más valientes y pundonorosos que ha dado el toreo".
Pero si Machaquito, en el ejercicio profesional "fue un dechado de dignidad y hombría, en su vida particular, una vez retirado, se mostró como modelo de caballerosidad, por lo que ganó amistades y el respeto de cuantos le conocimos y tratamos hasta el 1 de noviembre de 1955, en que se extinguió su vida", recuerda el periodista.
Al día siguiente, se efectuó el entierro, oficiado en la parroquia de San Miguel Arcángel, "repleta de público para rendir tributo de admiración y cariño al que fuera en vida un torero pundonoroso y un hombre sencillo, humilde y cabal. El pueblo de Córdoba acompañó luego los restos por las calles hasta el cementerio de la Salud, donde recibieron sepultura", narra José Luis de Córdoba al recordar a Machaquito, de quien hoy se cumplen 50 años de su muerte.

Fuente: Diario Córdoba 01/11/2005 R.H.

2 comentarios:

  1. Pensar que hoy en día,la prensa al servicio del taurineo,desorienta y equivoca al nuevo aficionado con el cuento-hasta nombre le han puesto-del "julipié".Qué no es otra cosa que echarse fuera y tirar la muleta a la cara de la res.Una pena.
    Felicitaciones por el blog y su libertad.

    Surco Taurino.

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  2. Cierta "prensa" desinformadora adopta como normal, todo lo que antes y siempre será considerado como trampa, ventaja y denigración del TORO.

    Con este Blog,intentamos coadyuvar enla lucha por la defensa de la integridad de la fiesta. Gracias por el aliento.

    Pocho Paccini

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